Por Yamile Abdel-Jalec
Directora de Imagen Física en SPECCHIO
Estás cenando en un restaurante con alguien especial, el
ambiente es íntimo y de repente, suena fuertemente un teléfono celular
rompiendo el encanto, la persona que está sentada frente a ti comienza a hablar
animadamente por teléfono. O quizás estás trabajando en la oficina y decides
que tienes cinco minutos para leer tus correo electrónicos, pero para hacerlo,
primero debes “navegar” a través de correos chistosos, inspiracionales,
alarmistas o varias cartas en cadena que debes enviarles a “10 personas en
menos de cinco minutos” para así asegurar buena suerte.
Estos son solo algunos de los cuentos de horror de la nueva
tecnología, y lo que pasa es que la ciencia y la tecnología han avanzado a
pasos agigantados en tan poco tiempo, que la gente apenas se está adaptando a
los cambios en el plano social.
Estos cambios han creado una cultura donde las personas
utilizan las ventajas de la tecnología pero a la vez van rompiendo las reglas
de la cortesía y la urbanidad. Se trata de multitudes hablando por teléfonos
celulares, enviando fotos y mensajes instantáneos a grandes velocidades que
encima, muchas veces atentan con el buen gusto y la sensibilidad.
Todos esperamos que los demás conozcan las reglas de
conducta de la sociedad porque cuando las conoces se te hace más fácil mantener
las buenas relaciones con los demás. Pero ese es precisamente el problema
actual, que además de usar el sentido común o no usarlo, muchos no conocer la
etiqueta establecida para estos casos (la netiqueta), donde nos orienta sobre
cómo usar estos medios de comunicación de una forma respetuosa y considerada
con los demás, y hasta provechosa para nosotros.
Increíblemente en la era de la comunicación instantánea es
cuando peor nos comunicamos, pues algunas veces olvidamos que estamos tratando
con una persona al otro lado del teléfono y ahí dejamos nuestros modales.
LAS REGLAS DEL USUARIO RESPONSABLE
Teléfonos celulares:
- Nunca
hables por teléfono en elevadores, museos, bibliotecas, iglesias, cines, teatros,
restaurantes, la sala de espera del médico y otros lugares públicos imponiendo
tu conversación a los demás.
- Si
tienes que usar el celular, mantén una distancia de por lo menos 3 metros de
las demás personas.
- Habla
en voz baja y realiza una llamada breve.
- Jamás
coloques el teléfono encima de la mesa del restaurante, por si alguien te
llama.
- Las
personas que están frente a ti deben tener la prioridad sobre tu teléfono.
- Si
por fuerza tienes que recibir o hacer una llamada, solicita le permiso o discúlpate
con la otra persona y busca un lugar privado.
- No
gradúes tu timbre del teléfono muy alto ni uses una música estridente.
- No
uses la cámara del teléfono para tomar fotos no autorizadas de otras personas.
Esto es una invasión a la privacidad.
Mensajes instantáneos
y de texto:
- No
uses los mensajes de texto para despedir algún empleado o aclarar una situación
personal.
- Cuidado
con el “tono” de tu mensaje. Las palabras suenan muy distintas cuando las
decimos que cuando las escribimos.
- Considera
la hora. El hecho de que estés despierto no quiere decir que los demás lo
estén.
- No
“bombardees” a los demás con mensajes por cualquier motivo. Interrumpir con
frecuencia a los demás es una descortesía y denota falta de consideración con
su tiempo.
Correo electrónico:
- Exprésate
correctamente cuidando la ortografía y redacción.
- Contesta
los correos dentro de un tiempo prudente. No más de 24 horas, no hacerlo es
equivalente de ignorar a esa persona.
- Evita
escribir en mayúsculas porque equivale a hablar gritando.
La regla principal es mantener en
mente que se está tratando con una persona y merece la misma cortesía que con
el trato intrapersonal.