Por Yamile Abdel-Jalec
El buen tiempo es sinónimo de bodas, pero ¡tantas bodas
juntas! nos complica qué elegir. Pero tranquila, aquí unos fáciles consejos.
Las
bodas en primavera tienen el inconveniente de que el estado del tiempo puede cambiar de la
noche a la mañana, complicando la elección del vestuario.
Conviene
tener preparada una prenda de abrigo que nos ayude a estar perfectas, sin
tener que sufrir por el frío.
La
clásica opción, pero también la menos abrigadora, es el chal. Puedes combinarlo
con el tono de tu vestido o crear un contraste como rosa pastel con un chal mint.
Según
la temperatura, puedes lucir un chal en seda o en lana. Si el problema es que
se te cae, colócalo sobre los hombros y sujétalo con un broche.
El
bolero o una capa corta son otra opción muy cómoda y práctica.
Los
blazers son una gran opción esta primavera o puedes apostar por una levita o
una chaqueta de tweed. Lo más
importante es que te sientas cómoda y segura.
En
cuanto al peinado, estamos en tiempo de calor, atrévete con las trenzas, tan de
moda este verano y elige un maquillaje en colores nude.
Boda de día. El largo del vestido es por encima de la
rodilla o un poco más arriba, pero nunca de minifalda, pues no sería de muy buen
gusto.
Si el vestido es muy recargado, busca complementos
que no compitan con él, si es sencillo y de color neutro, opta por complementos
y zapatos llamativos.
Si estás cansada de usar vestido en las bodas, puedes
optar por un traje en color pastel y tejido vaporoso que reinventan el clásico.
Nunca elijas gargantilla, brazalete, pendientes
largos y maxi sortija pues parecerás muestrario.
Puedes llevar un sombrero o tocado pero cuida que el
resto de los complementos sean discretos.
Los tocados son favorecedores y originales. Elige
bien el tocado basándote en el color y estilo de tu vestido.
Los tacones te ayudarán a estilizar la figura y verte
más esbelta. Para el día, puedes optar por unas plataformas en tonos atrevidos.
El bolso debe ser pequeño, como el clutch o una cartera de mano.
Lo más adecuado para una boda que se celebra más allá
de las 6 de la tarde, era ir de largo, pero las reglas se han relajado.
Para una boda en la tarde-noche ahora se permiten
vestidos largos y los vestidos más cortos que los cóctel.
Puedes optar por un vestido vaporoso. Por ser de
noche está permitido un escote más pronunciado pero lleva algo para cubrirte en
la ceremonia.
Otra opción es una falda larga con
caída y vuelo combinada con una blusa de seda.
De noche no son adecuados los
tocados o sombreros. Las sandalias altas y el bolsito-joya, serán tus mejores
aliados.
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